In hoc signo vinces.
La Semiología o Semiótica es la
disciplina que aborda la interpretación y producción del sentido. Esto
significa que estudia fenómenos significantes, objetos de sentidos, sistemas de
significación, lenguajes, discursos y los procesos a ellos asociados: la
producción e interpretación. Toda producción e interpretación del sentido
constituye una práctica significante, un proceso de semiosis que se vehiculiza
mediante signos y se materializa en textos. La semiótica también puede
definirse como la ciencia que estudia los sistemas de comunicación dentro de
las sociedades humanas. La peculiaridad del enfoque semiótico responde al
siguiente interrogante: "¿Por qué y cómo en una determinada sociedad algo;
una imagen, un conjunto de palabras, un gesto, un objeto, un comportamiento,
etc., significa?". La semiósfera, o biosfera semiótica, es el mundo de los
signos en el que todos los humanos viven e interactúan. Los signos son
representaciones que conforman un espacio delimitado con respecto del espacio
que lo rodea, que sería el espacio extrasemiótico. Estos ámbitos se encuentran
divididos por una frontera de puntos que pertenecen a ambos espacios, la cual
actúa como filtro y como traductor. Esta traducción se articula dando sentido a
la realidad extrasemiótica, es decir, otorgando sentido dentro de alguno de los
sistemas semióticos. La semiosfera funciona como un espacio de contención ante
la violencia del mundo, el cual es formado por códigos. En este sentido, la
semiósfera es el espacio semiótico fuera del cual es imposible la existencia
misma de la semiótica. El concepto general de la semiósfera remite a la idea de
que el espacio de la semiosis no es homogéneo, ya que existen esferas únicas de
sentido, así como “semiósferas particulares”, que serían los espacios
individuales o pertenecientes a distintos grupos sociales e históricos. Dada la heterogeneidad de la
semiósfera, como un conjunto de distintas manifestaciones semiósicas, el
mecanismo de traducción adquiere una relevancia especial, ya que toda relación
comunicativa es una relación de traducción. Aunque los diversos sistemas
semióticos no aparecen definidos de forma inequívoca, el concepto de cultura,
ligado indisolublemente al de semiosis, actúa como un estructurador. Los puntos
de la frontera de la semiósfera pueden ser equiparados a los receptores
sensoriales que traducen los irritantes externos al lenguaje de nuestro sistema
nervioso, o a los bloques de traducción que adaptan a una determinada esfera
semiótica del mundo exterior a ella. Esta idea se centra en dos puntos: la idea
de que hay un mundo que se habita y la noción de que los mecanismos de traducción
y filtro integran lo extrasemiótico en lo semiótico, lo cual deriva en una
concepción del intercambio comunicativo como un proceso de recodificación.
También plantea que la semiosis sólo puede ser un producto de la conducta de un
organismo en un determinado ambiente. Es el organismo el que crea el signo que
se convierte en una parte constitutiva de la semiósfera, y esto no constituye
una adaptación al ambiente, sino que es un acto de continua creación del
mismísimo ambiente. Tanto así.
Nota del editor.- Este es un mero ejercicio de confusionismo, editado
de Wikipedia sin agregar ni una sola palabra, excepto las dos ultimas.
me parece muy didactico....Gracias
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